Más de 300 personas se manifestaron en la plaza principal de la ciudad (San Martín), para reclamar seguridad en una ciudad que creció en población pero que decreció en calidad de vida. La inseguridad azota, y tan sólo dos patrulleros y ocho efectivos por turno custodian una ciudad que ronda los 55 mil habitantes.La marcha fue encabezada por el comerciante y vecino Marcelo Alejandro Ferrigno Paz, quien en forma clara y contundente se encargó de aclarar que “esta no es una marcha política, acá los vecinos están hartos de los hechos delictivos, y salen a manifestarse más allá de la bandería política que tengan”.En otra oportunidad, Ferrigno Paz subrayó que invitó personalmente al intendente Ricardo Curutchet a que se sumara y le hablara a los vecinos desde el mástil de la plaza. “Ya que en este distrito él es quien es el máximo responsable de la seguridad, puesto que la policía es comunal. Curutchet me respondió que permanentemente reclama para que se sume más personal a la comisaría y que haya más móviles. Ahora bien, yo creo que la política de seguridad que el intendente despliega es mala. No se entiende como hasta hace algunos años había seis patrulleros y que a medida que se van rompiendo no se arreglen o no retornen nunca más al distrito. Señor intendente, arregle las calles de los barrios como corresponden, porque cada vez que un patrullero ingresa a un barrio deja todo el tren delantero si se trata de un caso de urgencia. Por otra parte, para qué hay motos si no hay gente para manejarlas?”.Frente a los reclamos y las expresiones de indignación expresadas por Ferrigno Paz en representación de todos los que allí se concentraron, Curutchet salió a responder y a opinar sobre la situación que se vivió en esa marcha: “Me preguntaron sobre la conveniencia de hacer la marcha, y yo les dije que me parecía bien porque era el aporte de cada uno desde su lugar. El tema de la inseguridad no es ningún tema nuevo, siempre existió, existe y va a seguir existiendo, porque así siempre fue la condición humana, puede ser mayor o menos, lo que tenemos que ver es que actitud tomamos desde el Estado. Ellos me manifestaron que no era en contra de nadie, ni de la policía, ni contra el poder político sino para tratar de conseguir más recursos. El municipio colaboró con la marcha en el tema del sonido y la gente de tránsito, creo que no sumaba ni restaba la presencia del intendente. Y mira que generosos y democráticos somos, que una marcha que se puede tomar como en contra de la gestión, nosotros colaboramos y nos pareció bien que se haga. Expliqué que no fui porque por mi parte estaba cumpliendo con la obligación de conseguir cosas y recursos, que ese es mi trabajo, y creo que quedó sumamente claro”.Curutchet resaltó que si asistieron funcionarios del ejecutivo y concejales que acompañaron, declaró no haber hecho ninguna lectura política de esta manifestación.Además hizo referencia a las cámaras que están ubicadas en puntos estratégicos de nuestra localidad para detectar delitos, y dijo que “las cámaras son las que están homologadas por la justicia y sirven como pruebas, hay casos concretos de gente que fue detenida y está presa con elemento probatoria de la cámara”. Para Curutchet “no existe la perfección”, siempre hay asuntos y problemáticas por resolver y corregir, “siempre vamos a buscar más, quien no quisiera tener por ejemplo cincuenta agentes de tránsito perfectamente uniformados, que en vez de un Blackberry hubiera quince, que hubiera ocho motos, un helicóptero?”, dijo el jefe de gobierno de la Ciudad del Árbol, finalizando la charla con su reflexión de dos modos de ver la vida: “Una manera positiva, y una negativa de ver la vida, y yo elijo por verla positivamente, todos tenemos problemas, nadie está excento, pero esta es una modesta reflexión de un perejil de cuarta que soy yo, el intendente”.